Nuevamente por Internet encontré formas muy creativas de realizar marketing, interesados en el bienestar de las personas. El siguiente artículo lo bajé de la página web de Alpina Baby (Ejemplo de segmentación de mercado):

Comida especial para una época especial
		Las vacaciones son una época difícil tanto para las madres como para sus hijos. Los pequeños se interesan en otras actividades y su alimentación no les importa. Lo mejor que puedes hacer es aceptar con naturalidad los cambios en sus rutinas y sus procesos de adaptación a los diferentes ambientes al ámbito familiar. El mar, la playa y otras actividades son distracciones que convierten su alimentación en un malestar. Pero, no te compliques, sigue estos consejos y verás que todos disfrutarán sus vacaciones.
• • Si estás de viaje, darle pecho es la manera más fácil y cómoda de alimentar a tu bebé. • No empieces a ensayar nuevos alimentos en víspera de un viaje, si algo nuevo se presenta, sabrás con seguridad a qué se debe. No ensayes nuevas rutinas; como aprender a comer con cuchara, quitarle el tetero o nuevos horarios. Es preferible esperar a realizar los cambios al regreso de vacaciones. • Bocaditos como frutas y verduras, son especiales para el viaje. • Si vas a un restaurante, pide que te ubiquen en una mesa tranquila en la cual no molestes a las otras personas. • En la medida de lo posible, puedes llevar a la mano un babero y un plástico transparente para ponerlo debajo de la silla de tu hijo. • En los lugares donde haya duda sobre la pureza del agua, evita el hielo, el consumo de jugos naturales y de vegetales crudos que hayan sido preparados o lavados con esa agua. Lava las frutas y verduras con agua embotellada y pide los jugos y bebidas frías sin hielo. • Los alimentos se dañan fácilmente cuando sube la temperatura, de modo que hay que tener precauciones adicionales con los alimentos que necesitan refrigeración para su consumo. Es muy práctico por ejemplo, llevarlos en una pequeña nevera que sea fácil de llevar. • Si vas a viajar en avión, lleva tu propia provisión de jugos y pequeños pasabocas que calmen el hambre, hasta llegar a tu destino debido que los alimentos que sirven en los aviones son demasiado industrializados y refinados para los niños pequeños.